Clan Gnecco Corrucpción, Paramilitarismo y Robo

Entrevista a Cesar Augusto Miranda líder popular del departamento del Cesar. En este entrega El Karibeño Rebelde centra su atención en este territorio que ha sufrido como casi todo el Karibe la inclemencia de los clanes que se han apropiado del patrimonio de todo un pueblo. Igualmente habla sobre el paramilitarismo en la región del Cesar y otros temas de importancia social y política.

¿Cómo es la dinámica de los clanes en el departamento del Cesar?

“En el departamento del Cesar hay un clan que ha tomado mucha fuerza gracias a su conexión con la criminalidad, el narcotráfico, el contrabando y el paramilitarismo. Es de una familia proveniente de Italia y se asentaron en el centro de la Guajira, en el municipio de Barrancas, en el corregimiento Papayal. Allí llego el papá de los Gnecos. Estos muchachos crecieron en la bonanzas de la mariguana, del contrabando y fueron creciendo sus tentáculos económicos por lo que les produjo esa actividad. Comenzaron a trabajar con autopartes, con camiones, tractomulas y vehículos robados desde Venezuela.

Para la década de los 90 con la constitución política donde se abre por primera vez la elección popular de gobernadores y alcaldes, ya ellos eran una familia económicamente muy poderosa y deciden incursionar en política. El primer gobernador por elección popular en el departamento del Cesar fue Lucas Gneco Serchar. Fue gobernador del departamento en dos oportunidades, era el que direccionaba todos los temas políticos, económicos y militares, por sus nexos con el paramilitarismo. Y participaron del robo del Banco de la República de Valledupar, el famoso robo del siglo”.

¿Como es la vinculación de los Gnecos con el paramilitarismo?

“Con la llegada del paramilitarismo, esta gente empieza a participar de manera directa en el establecimiento de estos grupos. Jorge Gneco Serchar llegó a ser líder de los paramilitares y muy temido. Hasta ese momento para esa familia todo iba bien. Lucas Gneco fue gobernador, Pepe Gneco era senador y en ese momento por un conflicto de intereses entre los comandantes del paramilitarismo matan a Jorge Gneco, lo hace Jorge 40, ambos de la misma región. Con este hecho comienza a descender el poderío de esta familia. Entre la familia Gneco y los Araujo habían choques por intereses.

Recordemos que la cacica Consuelo Araujo de Noguera perdió en la disputa de la gobernación frente a Lucas Gneco y ese gobierno termina muy mal; con la muerte de Jorge Gneco empiezan a perder poder. Fue una jugada de ajedrez en la que ganan el pulso los Araujo. Estaban Álvaro Araujo y Hernando Molina. Pepe Gneco fue secuestrado por los paramilitares de Ramón Izasa en la Sierra Nevada y fue la intervención de Álvaro Uribe, quien viaja a la Sierra Nevada, lo que le salvo la vida negociando directamente. Los Gneco viven ese momento de derrota política y militar. Quedan sepultados.

Cuando se destapa el tema de la parapolítica viene una situación de decaimiento de la familia Araujo. Caen presos Álvaro Araujo el líder de ese clan y su hijo Alvarito, cae preso Nando Molina y se viene un periodo de transición entre los clanes nuevamente. Surge un candidato que aparentemente no se debía a ninguno de los clanes y era independiente, un señor de Curumaní que había sido alcalde y concejal de dicho municipio, Cristian Palacios. El se inicia en lo que fue el partido verde cuando se llamaba Partido Verde Opción Centro y logra ganar la gobernación con unos contendientes poderosos; como Jaime Murgas Guerrero de la familia de los poderosos agricultores de la Palma y de exministros de agricultura”.

¿Cómo llegan de nuevo a controlar el departamento los Gnecos?

“Cristian Palacios de Curumaní se mostraba como el candidato de los pobres, que andaba en chanclas, en un renault cuatro muy viejito en todo el pueblo. Este tipo logra ganar la gobernación y no logra hacer un buen desempeño, le dio miedo utilizar los presupuestos para invertir y cuando terminó su período quedó mucho dinero por invertir, asunto que en la cosa política y administración pública también se convierte en un delito pues el dinero es para invertir.

Con este fracaso logra de nuevo apoderarse de la gobernación Cielo Gneco Serchar, que ya había tenido a su hijo en la cámara de representantes. Para eso Cielo Gneco hace acuerdos con el anterior gobernador fracasado. Lanza a su hijo para el año 2011, Luis Alberto Monsalves y recobra fuerzas como clan. Estos llevan tres periodos en la gobernación y tienen un representante a la cámara y un senador en el Congreso de la República. Tienen varias alcaldías en el departamento, entre ellas la de Valledupar y varios concejales. Ha crecido con mucha fortaleza y no hay ningún grupo que le dispute el predominio desde la misma derecha como los Puello que están muy débiles. Los clanes se han estado turnando el poder en el departamento”.

¿Cómo esta hoy en día el paramilitarismo?

“El paramilitarismo no ha desaparecido en un 100% del territorio cesarense. En el único municipio del Cesar que hace parte de la Sierra Nevada, pueblo Bello, hay presencia de los paramilitares de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, como también de los pachencas o conquistadores de la Sierra, herederos de Hernán Giraldó. En ese territorio han hecho unos asesinatos y han realizado algunas acciones. En todo el valle del rio Cesar también hay una notable presencia paramilitar a la altura del municipio de Agustín Codazzi, allí están extorsionando a comerciantes y ganaderos con la propuesta de que los financien que ellos van a hacer limpieza social y que van a controlar el abigeato y la delincuencia en la región.

¿En el resto del departamento como está el paramilitarismo?

“Lo que son las goteras de la Sierra del Perijá, hizo presencia un grupo no identificado en la vereda de la Cabana en Sabana de Rubio y se decía que podían ser guerrilla o paramilitares, pero según las actuaciones y comportamiento con los campesinos uno logra comprender que no fueron guerrilla. Se habla de que fue un grupo armado. En la Jagua de Ibirico se tiene entendido que hay un grupo paramilitar que hace presencia en San Antonio y toda esa parte alta. En el sector de Media Luna hace semanas atrás incursionó un grupo armado que se dice son disidencia de las Farc. No se tiene claro si fue un enfrentamiento con la policía y hubo un civil herido. Tres días más tarde se realizó allí un consejo de seguridad y no se conoce que sucedió con eso.

En otros municipios, La Paz y San Diego la agencia nacional de licencias ambientales aprobó la explotación de 900 hectáreas para extraer el cobre y justamente en las tierras donde se aprobó esta licencia se dio un hecho de que un campesino que tenia un cultivo de maíz fue secuestrado, desaparecido por tres días y apareció muy golpeado. La persona no quiso decir que le había pasado pero tengo entendido que hay un grupo por allí que son los mismos que han estado en todo el Perijá para blindar la explotación del cobre según los análisis que nosotros hemos podido hacer”.

¿Cuales serían los objetivos de estos grupos paramilitares en la región?

“Hay varios intereses. Uno de ellos el tema de la explotación de los recursos mineros. Todos sabemos que si hay presencia de grupos armados paramilitares la gente se asusta para actuar y frenar esa explotación. Con ese miedo no habrá una acción de protesta por la población y aquí encontramos los intereses de las empresas que quieren llevarse los minerales que son favorecidos por la acción criminal de los paramilitares.

Otro de los intereses es el de los terratenientes, quienes ante la lucha de los campesinos sin tierra por tener un pedazo y hacer posesión de las fincas, para impedir esta justa reclamación, han fortalecido como pilares de violencia genocida a estos grupos de paramilitares en la región”.

¿Cuáles son a tu juicio, los tres principales problemas que vive el departamento del Cesar?

“El tema ambiental es una de las principales problemáticas. La explotación del carbón en todos los municipios del corredor minero ha generado una crisis ambiental profunda, un ambiente destruido, un aire contaminado, perturbaciones auditivas por el uso intensivo de explosivos y el transporte del mineral. La afectación en las fuentes hídricas es inmensa. Se han desviado cuerpos de aguas como el arroyo del Zorro, arroyo del Topacio, el arroyo del Platanal corregimiento de Casacara. Hay planes para desviar el rio San Antonio en las Jaguas de Ibirico, el Choroida un rio que ya esta seco. Todo esto ha generado un impacto ambiental muy negativo.

Otro de los problemas que hay en el departamento es el hambre. El hambre hoy esta matando muchos niños. Hay una crisis muy fuerte. Esto se debe a la corrupción, a los malos manejos del presupuesto público. Y siguen otros problemas como el desempleo que ocasiona hambre y tenemos otra crisis en materia de la educación. Hay una población que no ha podido acceder a una educación de calidad, universal y gratuita”.

¿Hay esperanzas en el nuevo gobierno?

“La respuesta en las elecciones presidenciales fue muy positiva para el nuevo gobierno. Esto quiere decir que las expectativas han aumentado por que ven que este nuevo gobierno puede ponerse de cara a resolver las necesidades básicas insatisfechas, de la mayoría de la población en nuestro departamento. Hay unas expectativas muy amplias frente a este nuevo gobierno”.

¿Cuáles serían las soluciones a los tres problemas que tu mencionas? (el deterioro ambiental, el hambre y la crisis de la educación)

“Todo esto se soluciona con justicia social, con gobernanza y buena inversión del presupuesto público. Administrar el presupuesto público con ética, aplicando los principios de la administración pública como son la eficacia, la eficiencia, la planificación, eligiendo alcaldes, gobernadores, diputados, ediles que tenga el carácter del servicio social, que les duela el pueblo. Allí radica la solución de todo y movilizando al pueblo, exigiendo sus principales derechos, exigiendo que se pare el hambre, mejor salud, mejor educación”.

¿Cómo está hoy el conflicto armado en el departamento del Cesar? ¿Cómo se esta manifestando ese conflicto social también?

“Por el sur del departamento se han venido presentando algunos secuestros, hay preocupación sobre ello en Pelaya, San Alberto, Aguachica. Ya en el centro y norte del departamento es menos la problemática del conflicto armado y esta la preocupación de la presencia de los grupos paramilitares y lo sucedido en Media Luna pero no hay un miedo penetrado en profundidad en la población. Son otros conflictos los que están en el centro como la hambruna, la falta de vías terciarias para que no se pierdan las cosechas. En lo rural ha aumentado el indice de la delincuencia.

En Valledupar hay mucha inseguridad, sobre todo en el mes de diciembre. Muchos casos de robos, asaltos. En materia de desempleo ni hablemos por que es un desempleo elevado, la economía es popular y lo que mueve a la economía es el mototaxismo, la venta ambulante, el rebusque del día a día”.

¿Cómo se aprecia la paz?

“Bueno si hablamos de paz total comprendemos que se entiende como el dialogo y la negociación con los diferentes actores armados, no hay una notoria manifestación ciudadana ni comunicativa. Frente a los diálogos que se adelantan con el ELN, no se siente en las calles la alegría y el entusiasmo por lo que se ha venido adelantando en esas conversaciones, cosa que nos debe preocupar por que se necesita que la paz este en la cabeza de una gran mayoría de ciudadanos y ciudadanas. El tema de los diálogos entre el gobierno y el ELN, es como muy superficial pocos líderes le prestan atención. No se ha despertado el fervor en las calles para que se comience a conocer que se dice, cual es la apuesta, que se acordó y como va el proceso. Hay mucho desinterés”.