SIMACOTA: NACE UNA LUZ

Me acuerdo, teniendo apenas siete años de edad, que mi abuela entró corriendo a la casa gritando que se iba a acabar el mundo. Hay que irnos de aquí. Se va armar una guerra. Decía con angustia mi abuela. Mi abuelo trataba de calmarla. Mecha toma la vaina con suavena. Hoy entiendo que su angustia fue por lo que se llamo la guerra de los misiles en el año 1961. Es decir, a Cuba habían llegado unos misiles para defenderse de los ataques de los Estados Unidos. Los misiles llegaron desde la Unión Soviética, país que hoy se llama Rusia.

Había muy poco que recoger. Unas esteras viejas. Unas sabanas de muchos colores, hecha con retazo de tela. Recoger unas ollas con muchos golpes por el uso y las caídas. Unas cucharas de palo hechas con la concha del totumo. El temor era perder las pocas pertenencias. Mi abuela se quejaba de que tocaba comenzar otra vez. Todo paso y volvió a acomodarse la vida.

El 7 de enero de 1965 en la Plaza Central de Simacota, fue la primera proclama del Ejército de Liberación Nacional como guerrilla alzada en armas, luego de tomar la población durante más de tres horas por parte de un grupo de 50 hombres.

Tres años más tarde, 1964, sucedió algo. Otro suceso trasmitido por la querida abuela, quien andaba toda pilosa con las noticias que escuchaba en un radio Philips, filis decíamos en casa. Se armó la san pablera mijo. Dicen que va a volver la matazón entre nosotros. Mi abuelo le dijo Mecha eso ya pasó hace años. Se refería mi abuelo Tomás a la violencia vivida en la región de los Montes de María y sus estribaciones. La llamada violencia. Gente pobre muriendo por montones. Mi abuelo y mi abuela llegaron a Cartagena huyendo de esa violencia.

Siguió mi abuela escuchando noticias. Dijo la radio que son una gente que dicen estar con los pobres. Hablan de liberación. La radio dice que no son liberales ni conservadores. Quienes serán expresó a manera de interrogación mi abuela Rosa Inés.

El manifiesto tenía doce puntos y era un programa para la toma del poder mediante un gobierno popular que “liberara” al país de la oligarquía y los monopolios. Una exigencia de revolución agraria, un plan de salud pública, un sistema popular de crédito, una reforma a la educación, el respeto por la libertad de culto y la formación de un ejército popular permanente. Vanguardia

Tomá (mi abuela se comía la S como buena costeña para decir Tomás), te acuerdas de una gente que andaba armada que nos defendían de los que mataban a los campesinos allá en San Pablo cerca de Palenque. Mi abuela hacia referencia a los guerrilleros liberales en Montes de María. Única guerrilla liberal en el Karibe que nació para defenderse de la violencia de la policía sanguinaria.

Mi abuelo Tomás dijo, entonces es gente buena. Esta palabra usada con frecuencia por mis abuelos significa mucho. Gente buena son gente que están con los pobres. Ayudan a los pobres. No están con los ricos. Son de nosotros los sufridos.

Según el portal del Eln Voces, se escogió Simacota porque fue el lugar donde Los Comuneros se alzaron contra el entonces gobernante reino de España (1781).

“En la herencia de San Vicente también hay un hecho inédito: allí hubo la única insurrección de los bolcheviques que se realizó en Colombia, el 29 de abril de 1929, considerada por algunos historiadores como la primera sublevación comunista armada en América Latina”. El Espectador.

Mis abuelos no sabían en ese momento que eran guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que se habían tomado a Simacota el 7 de enero de 1965. Yo tenía 10 años. Escuchaba todo como los loros en silencio.

Una luz ilumino sus vidas cuando supo que era gente buena. La luz de la esperanza me dijo mi abuela Mecha cuando hable con ella sobre este suceso y los milagros del radio filis.

Especial para Karibeño Rebelde desde las montañas de Colombia, montañas de la dignidad.